Boncan, adiestramiento, educación y modificación de conducta canina en Barcelona

Comprende a tu cachorro

Comprende a tu cachorro

Si estáis leyendo esto es porque tenéis ya a vuestro amigo con vosotros o porque os lo estáis planteando. Sea como sea, seguramente todos los aquí presentes hemos pasado por la ilusión de compartir nuestra vida con un perro. Convivir con un peludo es desde nuestro punto de vista una maravilla, de hecho, ¡no nos imaginamos la vida sin ellos!

Aun así, tener un perro también es difícil, se podría comparar muchas veces con tener un hijo.

En el momento en que se piensa tener un hijo o un cachorro, solemos idealizar la idea y pensamos todo aquello que podremos vivir con ellos. Pero la vida tiene muchos matices, no todo es blanco o negro, malo o bueno, y hay que ser conscientes de ello para intentar que no nos invada la tristeza o la frustración si algo no sale como esperábamos o no todo es como creíamos.

Boncan, adiestramiento, educación y modificación de conducta canina en Barcelona

Nuestra intención con este artículo es poder ayudar; a los perros a ser comprendidos y a las familias a comprender.

Para empezar, partimos de que somos especies diferentes dentro del mundo animal y eso hace que nuestros peludos tengan otra manera de hacer y de entenderse. Así pues, con paciencia, es imprescindible forjar un vínculo y un código de comunicación que les permita entendernos y a nosotros darnos a entender.

En el caso de los cachorros, a menudo nos encontramos numerosos casos de personas que se angustian debido a que hacen sus necesidades en casa y el gran problema de que muerden.

Estas dos conductas, entre otras muchas cosas, son normales.

La conducta higiénica de un cachorro tiene dos partes, una en la que tenemos que tener paciencia y ESPERAR, ya que el cuerpo del perro aún no ha madurado lo suficiente y le es imposible retener a causa de su fisiología. Y otra en la que tenemos que tener paciencia y ENSEÑAR.

Así pues, por mucho que le riñamos el cachorro no está preparado. Más vale tomárselo con tranquilidad porque no por enfadarnos o frustrarnos vamos a acelerar el proceso, al contrario, muchas veces podemos encontrarnos con la situación dónde el perro lo hace a escondidas para evitar la riña, interfiriendo y prolongando la enseñanza y generando incomprensión y tensión en el vínculo. Y esto es parecido a lo que sucede con los humanos: ¿o a caso le podríamos pedir a un bebé de 6 meses que deje los pañales y empiece a usar el baño? La educación amable y respetuosa debe estar siempre por delante de nuestra impaciencia, intolerancia y dureza.

Otra de las cosas que hemos comentado anteriormente, son las típicas mordidas de cachorro. Suelen desesperar mucho, ya que pueden ser muy frecuentes, intensas, dolorosas… ¡Pero aun así normales! Normales puesto que ellos no tienen manos con las que agarrar y experimentar. Los perros con su madre, hermanos y congéneres  juegan con la boca, prácticamente todo lo hacen con la boca. Entonces les sacamos de su habitad, de su familia y los integramos en la nuestra, y queremos que dejen de utilizar la boca a toda costa. Debemos enseñar al cachorro a no morder fuerte con toda la empatía y paciencia del mundo, y nunca olvidar que son bebés perrunos incorporados a los humanos, a nuestra sociedad, reglas y costumbres.

Siempre decimos que los perros son muy adaptables y rápidamente progresan, pero debemos respetar que cada individuo es único y tiene su propio proceso de aprendizaje. Unos pueden tardar más que otros y en este proceso hay que comprenderlos e intentar acompañarlos en todo momento.

Estas dos conductas (higiene y mordidas) solo son dos ejemplos básicos que hemos querido exponer para enviar un mensaje general, pero podríamos estar hablando de muchísimas otras cosas y detalles.

Los perros hacen un GRAN ESFUERZO para que nosotros estemos contentos con ellos, aprenden y se adaptan muy rápido a nosotros.

Es importante saber qué poder esperar y cuando, y ser conscientes de sus procesos cognitivos. Los perros no son robots y cada uno de ellos tendrá su forma de ser, por eso es fundamental intentar conocerles, para ser justos con ellos y saber cuanto y cuando podemos pedirles.

¡Pero ojo! Estamos hablando de enseñarles y pedirles cosas, pero ¿y nosotros? ¿Dónde queda nuestro papel de guía o tutor?

Si nosotros no les proporcionamos bienestar y no nos preocupamos por sus necesidades, seguramente nos será más difícil conseguir aquello que esperamos de ellos.

 

Boncan, adiestramiento, educación y modificación de conducta canina en Barcelona

Por ejemplo, muchas veces nos suelen decir: «mi perro no acude cuando lo llamo». Entonces la solución que solemos ver es: «pues no lo soltamos nunca». Esto es por ejemplo, como llevar a un niño al parque de atracciones siempre de la mano y sin dejarle autonomía ni libertad. Una bomba que puede estallar en cualquier momento.

El perro tiene la necesidad de correr libremente, socializar, explorar, jugar, de recibir cariño… y si no podemos ofrecer todo esto seguramente no conseguiremos que él sea feliz. A raíz de no cubrir estas necesidades es cuando pueden surgir malas conductas y justo en este punto es también cuando vemos familias desesperadas con poco tiempo para ponerse a buscar y trabajar una solución, con mucho disgusto y frustración.

Y nos encontramos con algunas familias que si hubiesen sabido las necesidades de los perros tal vez no se hubiesen planteado integrar un nuevo miembro canino en la familia. Es por eso que creemos que hay que apostar por la educación y la formación de calidad, para que poco a poco las familias puedan tener una amplia perspectiva de lo que significa tener un perro y puedan tomar una decisión con criterio propio.

Así pues, debemos entender y tener en cuenta que cualquier perro de entrada requiere atención, cariño, paciencia, dedicación, juego, paseos de calidad, aprendizaje, motivación, estimulación mental, compañía, socialización, explorar, morder, comer, dormir, tranquilidad, estabilidad… Un proceso parecido al de un niño.

Cuánto mejor hagamos las cosas de inicio, seguramente menos trabajo tendremos a la larga y más podremos disfrutar juntos. Siempre decimos que aquel tiempo que se invierta nos ahorrará problemas en el futuro, y nos permitirá disfrutar mucho más, lo cual consideramos que es el principal objetivo siempre.

Y así es, sin importar cuando llegue a nosotros o la edad, o el sexo, o la raza, toda adaptación bien hecha es una apuesta a aportar equilibrio y disfrute más adelante.

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